Otro de los atractivos de la zona está sin duda en los bosques, que sirven como nexo de unión entre las extensiones de prado y las imponentes masas calizas siempre presentes en el paisaje.
No es arriesgado decir que la variedad de especies y formaciones proporciona a la zona un valor extra para cualquier visitante amante de la naturaleza. Todas y cada una de las especies presentes en la zona han sabido encontrar su espacio y hábitat adecuado, creando comunidades vegetales de gran importancia.
La riqueza forestal del Valle y el Parque Natural es excepcional: encinares, abedulares, hayedos, robledales, bosques de ribera junto a los cursos de agua, completan un catálogo amplio y generoso de especies que no dejaran indiferente al visitante.
Los bosques siempre han sido lugares mágicos, llenos de misterio y leyenda. Y Soba no iba a ser menos. Caminando entre los robustos robles del fondo del valle, o bajo la refrescante sombra de los hayedos del Parque Natural, se respira esa atmósfera encantadora de cuento de antaño.
Quién sabe si quizás entre el musgo, o saltando entre las rocas de los ríos, podamos encontrar alguno de los habitantes de leyenda que pueblan nuestros bosques…tendréis que estar atentos…